Hay que estirar, aumentar ¡proyectar!
La percepción táctil
De las falanges mandibulares
Hasta digitar en el decir
El halo de humo
Del embrionario código atomizado,
Hasta escupir de cuajo el reverbero ajetreado
De la borra implícita anterior a la boca.
Hay que depurar, si, hay
Que mejorar la traducción de la percepción de la voz
Hasta reducir a la lengua
La faz motora de la licuefacción volitiva,
Hasta revelar la in-traducción innata
De la ecléctica sonoridad animácula.
Hay que mejorar, si, hay
Que agudizar la percepción
De las falanges del decir de la voz de la palabra
Hasta traducir, finalmente, el rugido bestial
Del amorfo griterío adentro
Que nos silencia
UnA verdadera montaña rusa en forma de poema...
ResponderEliminarComenzamos arriba y vamos sintiendo el Vertigo, ahhhhhhhhhhhhhhhhh ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh
Exquisitos saludos hermanito.-
Poemas para pensar el goce en estos tèrminos: "del decir de la voz de la palabra" Hablamos porque gozamos.¿En esa in-traducciòn innata,esta lo bestial, el goce mortìfero? Preguntas que me dispara el poema.
ResponderEliminarComo un encuentro tendrà que venir la interpretaciòn; que la interpretaciòn sea apofàntica decia(Lacan): que apunta al decir y no al dicho de la verdad o la falsedad.
(grietas poèticas como ejemplo)
"Hasta traducir, finalmente, el rugido bestial:"Intuyo que no se traduce, que no alcanza el texto, el significante se estrangula por los agujeros del cuerpo. Buen poema, afectado, pensativo, me ha dejado. Buen poema